Dentro de un departamento en que vive una universitaria, asi escuche aquella cancion que en mi niñez me hubiera impregnado los dias domingos mientras mi padre lo escuchaba y susurraba aquellas palabras que se tejian en la canción, no con una voz pampante de un cantante, sino con la emoción de un alma que canta.
"Yo adivino el parpadeo
de las luces que a lo lejos,
van marcando mi retorno.
Son las mismas que alumbraron,
con sus pálidos reflejos,
de las luces que a lo lejos,
van marcando mi retorno.
Son las mismas que alumbraron,
con sus pálidos reflejos,
hondas horas de dolor. "
Que fuerza que se impregnaba en sus ojos brillosos lleno de experiencias y de bailes de antaño.
Mire por el ventanal mientras seguia escribiendo un trabajo, y entonces las luces de la ciudad se hicieron lejanas y extrañas y en mi piel senti la caricia que papa le daba a mama, cuando la interceptaba en el pasillo del comedor y la tomaba de la cintura para bailar.
Recuerdo sentarme y apoyar mi cara en mis manos mientras me reia, y me contagiaba de la alegria de su baile, intimo, propio de una pareja, la complicidad entre sus miradas, el vaivén sensual de sus cuerpos.
Mire por el ventanal mientras seguia escribiendo un trabajo, y entonces las luces de la ciudad se hicieron lejanas y extrañas y en mi piel senti la caricia que papa le daba a mama, cuando la interceptaba en el pasillo del comedor y la tomaba de la cintura para bailar.
Recuerdo sentarme y apoyar mi cara en mis manos mientras me reia, y me contagiaba de la alegria de su baile, intimo, propio de una pareja, la complicidad entre sus miradas, el vaivén sensual de sus cuerpos.
"Y aunque no quise el regreso,
siempre se vuelve al primer amor.
La vieja calle donde el eco dijo:
"Tuya es su vida, tuyo es su querer",
bajo el burlón mirar de las estrellas
que con indiferencia hoy me ven volver"
Continuara...siempre se vuelve al primer amor.
La vieja calle donde el eco dijo:
"Tuya es su vida, tuyo es su querer",
bajo el burlón mirar de las estrellas
que con indiferencia hoy me ven volver"
